Francia pues el país pionero en blindar sus barcos. Las granadas explosionaban sobre los viejos barcos de madera y quedaban devastados, lo que evidenció que había que protegerlos y sobre todo tras la Guerra de Crimea se consideró una necesidad. Así, el 24 de noviembre de 1859 era botado en Toulon «La Gloire». Nacían los buques acorazados, también llamados del tipo ‘ironclad‘, barcos de vapor cubiertos de chapas de hierro y acero.
El Glorie tenía 77 metros de eslora y disponía un blindaje de 120 mm en el centro del casco y 75 mm en los extremos. Todavía mantenía la propulsión a vela junto con el motor a vapor y en sus 24 años de vida fue variando su armamento, reduciendo el número de cañones por unos más potentes, hasta montar 6 cañones de 240 mm en 1865. Finalmente fue desguazado en 1883.