Vamos a comparar el dripping del expresionismo americano de Jackson Pollock (1912-1956) con el Pop-art de Andy Warhol (1928-1987).
El expresionismo abstracto
A comienzos de la década de los setenta el expresionismo abstracto era el arte estadounidense por excelencia. Fue el primer movimiento vanguardista americano, vinculado emocional y cronológicamente a la Segunda Guerra Mundial. Algunos de los artistas creadores fueron Robert Motherwell, Franz Kline, Willem De Kooning, Arshile Gorky, Mark Rothko y Jackson Pollock, sufridores de la depresión surgida tras el crack del 29 de Nueva York, que lucharon posteriormente por una América más humanitaria y menos capitalista tras ambos marcados sucesos. Las nuevas generaciones de los sesenta dejaron atrás ese amargo recuerdo contrarrestándolo con el consumismo que presentaba la nueva sociedad, naciendo el culto al hedonismo y al bienestar; la cultura “pop”. A partir del Mayo de 1968 se plantea una pérdida de rumbo en la Historia del Arte y aparecieron nuevos comportamientos artísticos abanderados por el pop-art, cuyo mayor representante fue Andy Warhol.
En la década de de los años setenta, el expresionismo abstracto se convirtió en el arte estadounidense por excelencia
El expresionismo abstracto rechazaba el objeto y se centraba en la forma. Sus principales ideólogos fueron Alfred Barr y el crítico Greenberg, quien mantuvo una estrecha relación artística con Pollock. Crearon una historia del arte basada en presupuestos formales. Para ellos la modernidad empezaría con Manet y culminaba con el expresionismo abstracto. De esta forma Pollock sería el nuevo genio al igual que Picasso lo había sido para el cubismo. Necesitaban crear una vanguardia estadounidense. El pop-art fue etiquetado a mediados de los años cincuenta por el crítico británico Lawrence Alloway, referido a una cultura popular para hacer alusión a productos de los medios de comunicación de masas. En ese contexto sociocultural emergió un nuevo tipo de arte que tenía muy presente la cultura urbana como manifestación de las transformaciones que estaban surgiendo en la nueva sociedad: el pop-art. Nació en Inglaterra y Norteamérica, convirtiéndose en un fenómeno con sello propio y gran trascendencia sociocultural.
Pollock tomó de los muralistas mexicanos la intensa expresividad y la obsesión por el gran formato
Los artistas del expresionismo abstracto lucharon por la búsqueda de un arte que fuera capaz de distanciarse del influjo europeo. Maravillados por la fuerza de las vanguardias que venían de Europa, no se desvincularon por completo de ella y respondieron con un arte que se fue formalizando partiendo del surrealismo, el psicoanálisis, el existencialismo, la abstracción, el expresionismo y el cubismo de Picasso, muy influenciados por el surrealismo y el psicoanálisis, intentaron ahondar en el inconsciente experimentando un intenso debate existencial, con un alto precio vivencial y emocional que el incrédulo Andy Warhol no estaba convencido de pagar. Pero fue Warhol quien consiguió expresar el verdadero espíritu americano en el arte.
Tanto Pollock como Warhol buscaban reflejar el espíritu de su tiempo con su técnica novedosa y original
Jackson Pollock
Jackson Pollock, admirador de la obra de Picasso e inspirado por los surrealistas para explorar nuevos caminos pictóricos, tomó de los muralistas mexicanos la intensa expresividad y la obsesión por el gran formato. Pollock protagonizó la Pintura de acción donde todo se centra en el acto de pintar en un tiempo mínimo desarrollando una rápida acción gestual sobre el lienzo pero con una peculiar elaboración donde el artista pintaba con manos, arrastra, deja gotear o esculpía materiales que se secaban en la tela. Pollock usa nuevos materiales como la pintura industrial, la pintura de aluminio y esmaltes industriales. La pintura era aplicada con tubos o botes así como con cañas o trapos, mezclando todo tipo de materiales, como cristales atomizados o arena. En la técnica abandona el pincel y el caballete.
Andy Warhol
Warhol utilizó las técnicas gráficas para sus obras y su obra es altamente expresiva y variada de color: elegía un objeto o persona como protagonista y mediante la serigrafía aplicaba pintura a ambos lados de un acetato logrando los resultados deseados mediante la proyección de la luz. Los multiplicaba en hileras que distorsionaba o manipulaba, acercándose al arte con el contexto urbano y oponiéndose al concepto de obra de arte como artesanía: la obra de arte ya no era única. Pero sus obras no eran exactamente iguales, se diferenciaban por algún mínimo detalle para que fueran únicas y tuvieran mayor valor económico.
“[…] desde el inicio Warhol trabajaba para comprender el grado en que las imágenes dependen del contexto. Entendió que son lo que son por el lugar donde están, por quien las ha hecho y por cómo se describen sus virtudes. Ésta es, a mi parecer, la profunda lección que Warhol había aprendido de la tragedia del expresionismo abstracto, la terrible lección que había aprendido de Jackson Pollock, y que Pollock había aprendido demasiado tarde.»
A diferencia de Warhol, Pollock realizaba obras con ausencia temática: extendía el lienzo en el suelo sin tensar y procedía a distribuir la pintura con gestos espontáneos de goteo que lograban transmitir en el lienzo, sin necesidad de tocarlo, el pulso de una actitud vital y de un estado de ánimo. Los temas centrales de las obras de Warhol fueron el glamour, la fama, los desastres, la muerte, la violencia o el dinero. En el pop-art usaron sin prejuicios los recursos que los modernos medios de comunicación de masas ponían a su disposición; fotografía, cómic, publicidad, etc.
“Hacer dinero es un arte y trabajar es arte y los buenos negocios son el mejor arte”
Andy Warhol
El dripping
Con el dripping surgió una pintura informal y de libre abstracción, ejecutando el chorreo de forma que los colores se extendían de forma aleatoria mientras lo realiza con una especie de baile chamánico y onírico en torno al lienzo a la vez que escuchaba música a todo volumen como se puede observar en su obra Composición número 1. Pollock una vez que ultimaba el proceso creativo procedía a recortar el lienzo por donde consideraba y a titular sus obras para no influir en el espectador y prefería darles un número sin título. Andy Warhol relacionó la vida con el arte con una actitud trascendental y una naturalidad singular como la que caracterizó a los expresionistas abstractos norteamericanos, reduciéndola a una fría ironía. Su irónico distanciamiento le permitió adoptar una crítica posición aunque no lo hiciera de forma explícita, reflejó una realidad dejando la opción crítica al espectador mostrando con todo tipo de colores lo que no quería ver la sociedad de bienestar.
Warhol al igual que Pollock quiso reflejar en sus obras la transformación de la sociedad estadounidense pero también la europea, transcendiendo los límites de cualquier distinción local. Las latas de sopa Campbell de sus primeras obras configuraron una gran ironía en referencia al expresionismo abstracto, pero no con intento de ridiculizar sino con una actitud frente a la vida diferente. El pop-art quería recuperar lo cotidiano y aplicar el vocabulario de los símbolos ya familiarizados con el público en el arte A diferencia de Pollock, a Warhol le interesaba más lo económico que el arte: “Hacer dinero es un arte y trabajar es arte y los buenos negocios son el mejor arte”.
Ambos son artistas norteamericanos que buscan reflejar el espíritu de su tiempo con su propia técnica novedosa y con puntos de vista muy precisos, consiguiendo originalidad en un entorno reglamentado. Sus procesos artísticos se convierten en obras de arte que radican más en el planteamiento que en la técnica en sí; crear para sacar la verdad.