Históricamente han existido en España varias de las llamadas razas malditas por ser tratadas con desprecio, aislamiento y al ser tomadas como diferentes por la sociedad de la época.
Las razas malditas
El denominador común de estas razas es que se ubicaban en el norte de la península ibérica y principalmente en zonas montañosas1. Así nos encontramos a los Agotes navarros, los Vaqueiros asturianos y los Maragatos de León.

Agotes, los paganos
De las tres razas malditas son los situados más al este, en el valle de Baztán (Navarra). Su fisionomía lo diferenciaba del resto de navarros, pues eran rubios, bajitos y de ojos azules, lo que les aislaba del resto de la sociedad. Sospechosos de paganismo, se les obligaba a asistir a la iglesia y seguir la misa aunque desde un rincón del templo. Incluso se pueden encontrar hoy en día puertas de entrada a iglesias específicas para ellos.
Se dijo durante siglos que los agotes eran herejes que sellaban pactos con el diablo, leprosos que si sostenían una manzana se pudría rápidamente.
Los Vaqueiros asturianos
Llamados también como Vaqueiros de Alzada, situados en Asturias, eran un pueblo trashumante entre las montañas y la costa. Principalmente se dedicaban al vacuno, de ahí el nombre de vaqueiros. El termino alzada se refiere a sus habituales cambios de residencia, dado su carácter nómada. Estaban muy encerrados en sus tradiciones y el aislamiento del resto de la población era evidente, lo que provocó el recelo de las gentes y ser considerados como una de las «razas malditas». En algunos casos no se mezclaban ni entre los grupos que formaban, en unos lugares llamados brañas (las zonas de la montaña con mejores pastos). Tenían algunas prácticas de origen Celta y fueron acusados de paganismo. Al igual que los agotes, tenían zonas en las iglesias a la que no podían acceder.
Maragatos, los pescaderos
Son los situados más al oeste, por la zona de León. Esta población se dedicaba al transporte de mercancías, sobre todo el pescado de las lonjas de gallegas que llevaban a Madrid. Su celo por salvaguardar las mercancías se hizo famoso, hasta el punto les encargaban el transporte de materiales valiosos como joyas o ajuares de boda. Como curiosidad, y debido al material valioso que solían transportar, las casas de los maragatos no tenían ventanas, de esa forma evitaban a los curiosos. Pero la aparición del ferrocarril les quitó el negocio del transporte de pescado, por lo que decidieron cambiar el negocio. Se trasladaron a Madrid y comenzaron a venderlo. Todavía hoy es habitual ver pescaderías con nombres como maragato, maragatería, o similares. Tal fue las riquezas que alcanzaron algunos maragatos que se dedicaron incluso a la banca.
Me ha gustado la entrada. Muy curiosa!
Muchas gracias por tu comentario Carmen!! Saludos.
Felicidades por el artículo. Me ha faltado las fechas. Pero desconocía de estas historias y gente. Un saludo gracias.
Gracias tocayo. Hay partes de nuestra historia que no dejan de sorprendernos 🙂 Saludos.
Muy bueno
Muchas gracias Laorimi 😉
Un saludo , hay algunos errores sobre los vaqueiros, alzada no es un toponimo,se les llama vaqueiros de alzada porque «alzaban» es decir levantaban su asentamiento segun la epoca del año , practicaban(aun queda alguna familia que lo hace pero tan solo por mantener la tradicion y a pequeña escala)la trashumancia de corto recorrido,iban de los valles a los pastos de altura con su ganado,una braña es el lugar en que estan los pastos de montaña,praderas,y cabañas de piedra ,algunas con techo de teja,otras de piedra y otras de «teito»,es decir de piorno,un arbusto de la zona,braña tambien es un apellido,no formaban clanes ,simplemente debido a la endogamia estaban mas o menos emparentados entre ellos.soy asturiano y ademas de montañero estoy emparentado con vaqueiros.
Hola Monchu, y muchas gracias por comentarnos y aportar más información al artículo.
Un saludo!!
Es un placer,errare humanum est…lo que no desmerece el esfuerzo y menos el interes del tema,gracias a ti,saludos.