D. Diego Rodriguez de Vivar, único hijo varón de Rodrigo Díaz de Vivar, “el Cid Campeador”, falleció con 22 años en la batalla de Consuegra que enfrentó a los castellano-leoneses de Alfonso VI contra los Almorávides del emir Yusuf ibn Tasufin. Está batalla se celebró el 15 de agosto de 1097 fue un gran revés para las fuerzas cristianas que ya habían sido derrotadas por esta horda musulmana en 1086 en Sagrajas. Estas derrotas supusieron un parón en las conquistas que habían llevado a cabo en años anteriores como la como Toledo y Valencia.
En el fragor de la batalla, los caballeros cristianos se vieron rodeados por las alas musulmanas. En el flanco derecho se encontraba D. Diego que no pudo escapar al cerco cuando el Rey , con la batalla perdida, ordenó la retirada, algo que sí pudieron hacer Alvarfañez o García Ordoñez entre otros.
Desde el año 1997, Consuegra conmemora su fallecimiento con una ceremonia funeraria anual.