spot_img

El gambito Evans, la ola de mar que creó una jugada genial de ajedrez

El capitán W. D. Evans sufrió aquello de «pieza tocada, pieza jugada«, algo que nos ha pasado alguna vez a todos los que jugamos al ajedrez. Pero lo que habitualmente significa un movimiento en falso, esta vez consiguió una de las jugadas más populares del tablero de las 64 casillas.

William Davies Evans (1790 – 1872) fue un capitán de navío de la compañía postal Royal Mail que había pasado toda su vida en el mar, lo que no le había alejado de su mayor afición, el ajedrez. En 1824, mientras el capitán jugaba una partida en su barco durante el trayecto Milford Haven a Waterford, una gran ola sacudió la embarcación cuando le tocaba mover. El movimiento le hizo situar un peón en lo que parecía un lugar equivocado pues sería presa fácil del alfil de su rival. Sin quererlo había inventado el gambito Evans, donde ese peón en realidad era un sacrificio muy peligroso para su oponente.

gambito evans
Movimiento del peón en el gambito Evans (1.e4 e5 2.Cf3 Cc6 3.Ac4 Ac5 4.b4)

Un gambito en ajedrez es una forma de apertura en la que se sacrifica alguna pieza,  normalmente un peón, para conseguir ventaja ya sea en tiempo o en posicionamiento. En muchos de los casos aceptar la pieza de un gambito es una decisión peligrosa, por lo que lo más recomendable suele ser declinar tan generosa oferta.

En 1826 pudo probar su novedosa jugada ante un jugador profesional, derrotando en Londres al irlandés Alexander McDonnell. El gambito Evans adquirió una enorme fama durante la Era Romántica de ajedrez, que duró aproximadamente entre 1830 y 1880. Algunas de las partidas de ajedrez más famosas de aquellos tiempo usaron este movimiento. Un buen ejemplo es la siempreviva, una partida informal celebrada en Berlín en 1852 entre el campeón del mundo Adolf Anderssen y Jean Dufresne. Es este caso Dufresne, con negras, aceptó el gambito y terminó perdiendo la partida.

Hoy en día existen formas de combatir al gambito Evans, tanto aceptando el peón como rechazándolo. Una de las más populares es la defensa Lasker, desarrollada por el alemán Emanuel Lasker, que fue el campeón del mundo que más años retuvo el título (27).

Al capitán Evans también se le asocia la invención de la iluminación tricolor para la navegación naval, incluso llegó a afirmar que por ello el propio zar de Rusia le había regalado un cronómetro de oro.

spot_img

ÚLTIMOS ARTÍCULOS

Autor

Comparte

1 COMENTARIO

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí